¡Llegó el verano! Esa época esperada en la que dejamos atrás los horarios de clases y los exámenes. Pero que no se nos vaya la olla: descansar no significa quedarnos todo el día en el sofá viendo series. El verano es perfecto para hacer un montón de cosas nuevas, divertidas y también saludables, ¡no es incompatible!
Si te preguntas cómo aprovechar estos meses sin aburrirte y cuidando tu cuerpo y mente, aquí te dejo un montón de ideas. ¡A pasarlo en grande!
Durante el curso, con los horarios estrictos, muchas veces no encontramos tiempo para movernos lo suficiente. En verano tenemos tiempo libre para aburrirnos (ojo, que aburrirse también es sano, si no lo crees lee este artículo) y eso se convierte en una oportunidad para hacer ejercicio sin que se sienta un castigo o una tarea más en la apretada agenda.
¿No haces ejercicio habitualmente? No pasa nada. El verano es ideal para empezar con actividades suaves, como caminatas o paseos en bici al amanecer o atardecer, yoga en el parque, o nadar en la playa o piscina. Estos ejercicios son de bajo impacto, aptos para todos los niveles, y además te sentirás mucho mejor si los acompañas con buenos estiramientos antes y después.
Si te vas de vacaciones a otro sitio, investiga qué puedes hacer allí. ¿Playa? Deportes acuáticos: kayak, paddle surf, snorkel… ¡hay mil opciones! Y no necesitas ser experto, muchos sitios tienen clases para principiantes. ¿Montaña? Senderismo o excursiones. Explora rutas bonitas cerca de ti. ¿Te quedas en la ciudad? Busca actividades guiadas en los parques y piscinas municipales o hazlas por tu cuenta.
Cuerpo activo, mente en paz. La meditación no es solo para personas zen. Si todavía no la has descubierto, te recomiendo este artículo. Puedes empezar con 5-10 minutos al día, en un sitio tranquilo, enfocándote en tu respiración. Puedes usar apps como Calm o Headspace para que te guíen.
No es tarea, no hay que hacer resumen ni subrayar. Solo elige un libro que te guste (novela, cómic, fantasía, terror, lo que sea) y sumérgete en él. Además de entretenerte, estás estimulando tu mente y aprendiendo sin darte cuenta.
¿Has probado a crear tu propia cometa? Aquí te dejo un vídeo para hacerla sencilla. Podrás volarla en la playa. ¿O pintar, tejer o hacer un puzzle en casa con buena música? Las manualidades reducen el estrés, mejoran la concentración y te permiten expresarte. ¡Dale rienda suelta a tu creatividad!
Haz tu propio helado saludable, batidos, polos de fruta natural… Para mí, un clásico no tan clásico irresistible que nunca falla y siempre sorprende son los gazpachos de melón o sandía. Busca recetas fáciles y pruébalas con tu gente. ¡Reviven a cualquiera en estas olas de calor!
Quizá puedes buscar lugares a las afueras de donde vives donde recoger higos, arándanos, melocotones… una actividad divertida y muy sabrosa. O puedes echar una mano en el terreno de algún familiar o amistad y hacer una macedonia o darte un festín.
Prepara comida rica, fresca y equilibrada y pasa una tarde al aire libre con tus amistades o tu familia. En verano cambiamos hábitos (diferentes horarios, salimos más de casa) y generalmente hace más calor… y eso afecta a lo que comemos. Pero no significa alimentarse peor. Al contrario, es el mejor momento para darle un giro saludable a tu dieta sin dejar de disfrutar, pues apetecen más productos frescos como frutas y verduras, o incluir legumbres en formato ensalada. Y, por favor, nada de dietas milagro. Si tienes dudas o quieres mejorar tu alimentación, consulta siempre con un profesional. Cada cuerpo es distinto y lo que vale para uno, no siempre vale para otro.
Un idioma con Duolingo, un instrumento, pintura… Hay un montón de vídeos en Youtube o cursos online gratuitos que puedes aprovechar. Creatividad también es salud.
Sal con tus amistades (quizá veranees en un lugar en el que te encuentres o reencuentres con personas maravillosas), pasa tiempo con tu familia, conoce gente nueva, aprovecha para ir a espacios sociales como conciertos. Las relaciones son clave para el bienestar emocional.
Para realizar estas actividades de manera segura en la época estival, no te olvides de evitar las horas de más calor, hidratarte adecuadamente (¡no esperes a tener sed para beber agua!), protegerte del sol mediante gorras, gafas y crema solar y cuidar tu higiene del sueño.
El verano es para descansar y también una oportunidad increíble para cuidarte, moverte más, comer bien y rico, disfrutar del tiempo libre y descubrir nuevas pasiones. Lo más importante que puedes hacer para ti mismo o misma es lo que te haga sentir bien. Escúchate.
¡Hasta pronto!
Psicóloga y acompañante de personas en situación de vulnerabilidad: experiencia con menores en riesgo de exclusión social, migraciones, diversidad funcional y colectivo LGBTIQA+. Amante de todas las formas de vida, su misión es crear espacios sostenibles. Cooperante y gestora en proyectos de agroecología y protección animal. Escritora y fotógrafa en búsqueda de aprendizajes. “Cualquier momento es bueno para la ternura”.
Utilizamos cookies para darte la mejor experiencia en nuestra web. Puedes informarte más sobre qué cookies estamos utilizando o desactivarlas en preferencias.
